La casa de este post no deja indiferente a nadie, es tan sencilla pero a la vez está tan cargada de detalles que la hacen única y especial, porque mires donde mires ves notas peculiares que hacen pensar que tiene encanto y se ha diseñado y decorado para vivir y hacer sentir.
A pesar de tratarse de un piso de decoración escandinava, no me parece una vivienda mas de las que estamos tan acostumbrados a ver, quizá por la convivencia de lo antiguo y lo moderno, el uso de diferentes materiales, la conexión entre estancias, las tonalidades grises que la hacen singular y aportan calidez a los ambientes, las paredes encaladas o las molduras de escayolas de los techos que contrastan con las paredes… Estos y otros detalles son los que me hacen percibir esta vivienda con otros ojos.
Techos altos, espacios amplios con bases neutras predominantes que permiten jugar con discretos y personalizados contrastes, suelos de madera natural, amplios ventanales y una estupenda iluminación natural hacen de este piso un lugar en el que apetece entrar, quedarse y disfrutar.
Bienvenidos y no perdáis detalle de cada uno de sus rincones.
Diseño y buen gusto caracterizan esta vivienda, donde el orden y una acertada distribución permiten disfrutar de cada uno de sus rincones, una casa práctica, pensada para vivir, disfrutar de ella y con ella. ¿Qué te ha parecido?
Feliz día.
Sonia.
