Uno de los principales problemas a la hora de decorar nuestra casa de cara a las fiestas navideñas es la falta de espacio para colocar el árbol de Navidad, el elemento más típico y el cual no puede faltar en ningún hogar. Es por ello, que he encontrado una solución a este problema, al mismo tiempo que vamos a conseguir una decoración original y práctica, esta será ecológica y estará al alcance de todos los bolsillos. Se trata de un árbol de pared realizado con palos que podréis elaborar vosotros mismos.
Para llevar a cabo esta manualidad, necesitaremos recolectar palitos que nos ayuden a darle forma, excusa perfecta para salir a pasear al campo o por el parque, disfrutar de los paisajes del otoño y la naturaleza y seleccionar aquellos palos que mejor se adapten a nuestra composición.
Tras la recogida, lavaremos y secaremos bien las ramas, evitando de este modo la presencia de restos de arena, tierra o algún bichillo. Antes de comenzar con el montaje, sería conveniente plantearlo en el suelo, de forma que sepamos como se van a colocar las diferentes ramas, seleccionándolas en función de su tamaño y en un determinado orden, empezando por las de menor tamaño para la copa y acabando con las más largas en la base.
Una vez hecho el planteamiento, los extremos de cada palo van unidos a los inmediatos inferiores, es decir, iremos atando desde el del inicio hasta el del final con cuerda de sisal, asegurándonos su sujección y forma creada entre todos ellos, guardando cierto equilibrio. Para decorar nuestro árbol podemos utilizar una guirnalda de luces y algún detalle que lo personalice y cree ambiente navideño, en el ejemplo se han colocado algunos pompones de lana que potencian el efecto invernal, de forma que el blanco con la madera transmite mayor pureza y serenidad.
