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¿Cuántas veces se nos ha fundido una bombilla y lo primero que hemos hecho ha sido tirarla? Pues os propongo una original idea para reciclar y aprovechar las bombillas inservibles. Se trata de crear con ellas floreros, una solución decorativa ideal para adornar cualquier rincón, ya sea colgadas, sobre un mueble o un centro de mesa, con el que conseguiréis un aire romántico y delicado, especialmente apropiado para esta época del año tan alegre y colorida.

Para ello necesitaréis:

• Bombilla de luz incandescente clara 
• Destornillador 
• Alicate 
• Alambre 
• Guantes (para protegernos)

Antes de nada, nos pondremos los guantes para evitar hacernos daño en caso de que el cristal se rompiese. Con los alicates quitamos el pie de contacto eléctrico y el aislamiento, de forma que nos quedará el casquillo abierto y nos permitirá tener acceso. Después introducimos el destornillador por el casquillo para romper el soporte de vidrio y con las alicates terminamos de sacar los alambres de contacto del interior de la bombilla.Una vez tenemos la bombilla vaciada, la limpiamos, echamos agua y lista para decorar con las flores que más nos gusten. El alambre solo será necesario en los casos que decidáis colgarlas o crear ciertas estructuras como soporte.

Con esta sencilla forma de reutilizar las bombillas puedes decorar espacios interiores (baños, cocinas, salones, dormitorios…), exteriores (jardines, patios, porches…), e incluso para poner un toque bucólico en celebraciones especiales como pueden ser bodas o fiestas al aire libre. Es sencillo de realizar, barato y el resultado es sorprendente. ¿Ya has pensando donde las vas a colocar? ¿Apoyadas o colgadas?

Sea cual sea vuestra elección será un acierto, algo tan bonito y sutil siempre será un éxito.

* Truco: Si no nos gusta como se ve el casquillo, podéis pintarlo de algun color o cubrirlo con alguna tela atractiva.

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Muchos besos!!!